Este brazo robótico de 7 ejes se montó en una plataforma móvil sobre orugas y se utiliza en camiones de la industria del neumático. Gracias a una pinza sofisticada, un sistema de visión y la inteligencia artificial desarrollada por el Centro de Estudios e Investigación Michelin de Ladoux, el brazo robótico identifica y agarra los neumáticos y los coloca en una cinta transportadora situada bajo el robot, que transporta el neumático a su zona de procesamiento.
En modo manual (controlada por radio), la plataforma puede desplazarse con el robot en todas las direcciones, con destino al muelle de carga y descarga. Una vez en el muelle, pasa al modo autónomo. Sin embargo, cuando trabaja en el estrecho remolque del camión, el robot sólo puede avanzar y retroceder de forma limitada y sólo puede girar ligeramente para volver a centrarse. Esto planteaba un problema de espacio, sobre todo para guiar los numerosos conductos de alimentación, control y neumáticos desde el exterior hasta el remolque donde trabaja el robot. Alternativas como una batería para la alimentación o un motor quedaban descartadas debido a las restricciones de tamaño y peso del robot.
En su lugar, se optó por un sistema de cadena portacables, que se arrastra horizontalmente detrás del robot sobre el hormigón y el encofrado de madera o plástico del remolque del camión con un recorrido mínimo de 14 m, una velocidad de 12 m/min. y una aceleración de 1 m/s2. La escasa diferencia de altura entre el muelle y el remolque también planteaba un reto y requería un tendido de cables lo menos desgastado posible. Como la cadena estaría ligeramente descentrada de la vía de la plataforma móvil, tenía que poder aceptar torsiones/deformaciones.